Se celebraba el día de las madres en cierto país del continente América, cuando una pequeña niñita nació en donde tenía que nacer.
El tiempo, . . . esa mala idea que a Dios se le ocurrió instalar en la existencia y en la vida, . . . empezó a avanzar a su velocidad natural.
Al cumplir su primer año de vida, había llegado también el tiempo del bautizo, la pequeña niña no sabía nada del mundo, ni de la vida, no sabía ni siquiera cómo se llamaría.
El tiempo, . . . esa precisa e indetenible idea que se le ocurrió a Dios, siguió avanzando, . . . ya la pequeña niña se graduó del kinder, va a la doctrina los fines de semana y a la primaria de lunes a viernes.
Ha aprendido que cada diez de mayo, el día de las madres en su país, es un día muy especial para todas las madres que lo celebran.
En la escuela hacen bailables y actos especiales, y en la iglesia se hace algún tipo de evento equivalente, . . . para honrrar aunque sea un poco, todo lo que ésas almas maravillosas hacen por sus pequeñas creaciones y por mantener en funcionamiento su hogar.
De los seis a los doce años de edad, . . . la pequeña niña ya ha logrado algunos de sus primeros logros, aprendió a leer, a escribir y a hacer cuentas. También hizo la primera comunión y su confirmación, y por supuesto, como no Reprobó ningún grado, a los doce se graduó de la primaria.
El tiempo, . . . esa energía intangible que mide la vitalidad de todas las especies de seres vivos que Dios creó, . . . sigue avanzando, . . . sin detenerse ni una sola millonésima de segundo.
La pequeña niña ya se ha convertido en una adolescente, ya empieza a ser más atractiva para los chicos, y también algunos chicos empiezan a gustarle a ella, a medida que se van acercando sus primeros quince años de existencia y de vida.
Las telenovelas le han enseñado que ha de encontrar a un galán perfecto, de cuerpo atlético, alto, inteligente, educado, exitoso, todo un personaje de telenovela. Pero ella ha olvidado que no es perfecta, no tiene cuerpo de modelo de pasarela, no es alta, y no se parece en nada a la guapísimamente maquillada actriz de su telenovela favorita.
Una canción de un sabio cantautor guatemalteco, dice que: "La que busca un Superman, termina con un pendejo," . . . y la mayoría de las veces, éso termina siendo cierto.
La adolescente, . . . al graduarse de la secundaria a los quince años de edad, no tiene ni idea de cómo demonios funciona la vida.
Pues desde el día de su primera comunión que más bien fue la última comunión, . . . no ha vuelto a visitar la Iglesia, y ni siquiera de pura casualidad ni por curiosidad, no se le ha ocurrido leer la Biblia, . . . para ver si logra descubrir o aprender algo sobre la vida, . . . o sobre sí misma.
Luego de la preparatoria y la Universidad, . . . era una genio en informática, física, biología, ciencias naturales, matemáticas, geografía, historia, economía y administración, . . . pero no tenía ni la mínima idea de cómo demonios funcionar ella en la vida.
Un día, sin saber cómo y sin saber por qué, se enamoró de un chico que ella sentía que tenía algo especial, . . . de pronto sintió que él llenó de amor su corazón, y ella en ese momento pensó; "Éste es el mío."
- No era como el que las telenovelas le habían pintado, pero era mejor que nada, era Real y verdadero, sin maquillaje y sin libretos.
Sin matrimonio, la ahora mujer de veinti tantos años de edad, se preparaba llena de emoción porque pronto sería madre.
El tiempo, . . . esa buena idea que se le ocurrió a Dios para que cada cosa tenga su ciclo, . . . había transcurrido casi sin sentirse.
Aquella mujer que hacía apenas veinti algo había sido una pequeña Recién nacida, . . . ahora sería la madre de algún pequeño Recién nacido.
- No tenía ni la mínima idea de cómo demonios ser madre, así que le preguntó a su madre, que ya pronto pasaría a ser abuela: <<Amá, ¿Cómo le hago para ser buena madre?>> - Su madre la miró sonrriente y le dijo: <<No tengo ni idea, . . . yo aún sigo tratando de aprender hija mía, . . . sólo ama y perdona siempre, . . . lee, aprende y enseña, . . . prepara a tus hijos para cuando tú ya no estés, . . . porque el tiempo hija mía, . . . indica de que por ley, unos llegan primero y primero se van, . . . y éso si a Dios no se le ocurre otra cosa entre medio de la historia. . . .
Los hijos y las hijas son, . . . el presente y el futuro de la humanidad, . . . trata hija mía, . . . que tus hijos sean la herencia y la enseñanza que deseas dejarle al mundo, . . . por éso tú debes ser el cambio que deseas ver en el mundo hija mía, . . . porque tú eres el ejemplo, . . . no sé cómo ser buena madre hija mía, . . . sólo sigo tratando de ser buena hija ante la memoria de mis padres, . . . y ante los ojos de Dios. . . . y me sentiría orgullosa y muy honrrada, . . . si tú hicieras lo mismo en memoria mía.>> - Concluyó la sabia futura abuela, que ya tenía blanco parte de su pelo, y la piel marchita.
Desde ése día se ha vuelto tradición, . . . que cada diez de mayo, . . . el día que se celebra y se honrra el valor y la importancia de las madres, . . . en la casa de aquella humilde pero honrrada familia, se lean las sabias palabras de aquella ahora difunta abuela, . . . que un buen día fue, . . . una diminuta criatura Recién nacida, . . . y la historia vuelve a empezar sin verdaderamente finalizar, . . . mientras continúa.
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